The Open Championship, el torneo de golf más antiguo del mundo, ha sido escenario de hazañas que definieron la historia del deporte. Leyendas como Jack Nicklaus, Tom Watson, Seve Ballesteros y Tiger Woods no solo ganaron títulos, sino que marcaron una era con su talento y carácter. Su impacto va más allá del green: en el mundo de las apuestas deportivas, su legado sigue influyendo en cuotas y mercados, atrayendo tanto a expertos como a novatos que acceden mediante bonos sin depósito para nuevos jugadores, permitiéndoles experimentar la emoción del mismo sin riesgo inicial.
A continuación, repasamos a los grandes campeones que hicieron de este un torneo inolvidable.
#1 Jack Nicklaus
Jack Nicklaus, conocido como “El Oso Dorado”, es uno de los jugadores más célebres de la historia del golf. Brilló especialmente en The Open, con tres victorias (1966, 1970 y 1978), veces en las que demostró una consistencia formidable. En el 150.º aniversario del torneo, los aficionados lo votaron como el más grande en la historia del campeonato.
- 1966 (Muirfield): ganó su primer Open, con una actuación impecable que estableció las bases de su dominio.
- 1970 (St Andrews): protagonizó el legendario “Duel in the Sun” junto a Tom Watson, mostrando temple y precisión (playoff incluido).
- 1978 (St Andrews): su victoria consolidó aún más su estatus, con un notable bagaje de siete segundos puestos y varias finales disputadas en The Open.
La longevidad de Nicklaus fue notable: entre 1963 y 1980 nunca se perdió el corte, logró numerosas top‑5 y top‑10, convirtiéndose en sinónimo de excelencia.
#2 Tom Watson
Tom Watson brilló en terrenos escoceses como pocos. Ganó cinco veces The Open (1975, 1977, 1980, 1982, 1983), todas en campos links en Reino Unido. Su victoria más icónica llegó en 1977 en Turnberry, en una batalla épica contra Nicklaus conocida como “Duel in the Sun”. Además, casi se corona nuevamente en 2009 a los 59 años, perdiendo en playoff – un testimonio de su habilidad y longevidad.
#3 Seve Ballesteros
Seve Ballesteros, pionero del golf europeo, conquistó el Open tres veces: 1979, 1984 y 1988. Su triunfo en 1979 en Royal Lytham & St Annes fue el primero para un español y uno de su generación, acabando con la hegemonía anglosajona. El momento estelar de su carrera llegó en 1984 en St Andrews: tras un birdie en el 18, celebró con su famoso puño alzado, sellando una de las victorias más emotivas de la historia. Su último título en 1988, se dio bajo lluvia intensa y retrasos, reafirmando su temple.
#4 Tiger Woods
Tiger Woods se convirtió en leyenda al ganar The Open tres veces: en 2000, 2005 y 2006. Su dominio comenzó en 2000, donde logró un récord de −19 bajo par en St Andrews, ganó por ocho golpes y completó el Carrera Grand Slam, siendo el más joven en lograrlo a sus 24 años. Volvió a St Andrews en 2005, liderando de punta a punta y sumando su segundo título en el mítico campo. En 2006, en Royal Liverpool, demostró su adaptabilidad y fortaleza al ganar pese al clima exigente del links.
Un estudio académico demostró cómo su mera presencia intimidaba a sus rivales: en los años 1998‑2001, los jugadores emparejados con él promediaban 0.462 golpes peores. Esa presión se traduce en su aura legendaria.
Presencias más allá del campo… resuenan en las apuestas
La presencia (o incluso el legado) de estas leyendas influye notablemente en las apuestas deportivas en torneos como The Open, y aquí te contamos de qué manera.
- Influencia en cuotas y mercados: cuando jugadores como Woods, Nicklaus o Ballesteros están activos, las casas de apuestas tienden a ofrecer cuotas más bajas debido a su historial ganador y experiencia en majors. Incluso tras su retirada, la historia de estos campeones sigue influyendo en cuotas implícitas para eventos comparables. Un ejemplo claro es Scottie Scheffler en 2025: sus éxitos en grandes torneos lo colocan con una cuota corta (+275), reflejando una probabilidad del 26.7 %, similar a lo que generaba Woods en su etapa dorada.
- Intimidación y efecto campo: el efecto psicológico que Woods generaba en sus competidores también afecta las apuestas en vivo (in‑play); los emparejamientos con él solían conllevar puntuaciones más altas de sus rivales, lo que se traduce en mayores pagos en mercados de golpes totales y rendimiento por ronda.
- Crecimiento del interés y volumen de apuestas: la participación de estas estrellas dispara la atención del público, lo que se traduce en incremento de volumen de apuestas, tanto en pre‑torneo como en vivo. Los grandes nombres atraen tanto a apostadores experimentados como ocasionales, favoreciendo promociones especiales, mayores coberturas de cuotas y mercados adicionales (top‑10, top‑20, head‑to‑head, etc.).
- El legado como base para favoritos “tipo”: aunque los grandes campeones ya no compiten, su legado crea una plantilla para comparar a las nuevas figuras: cada vez que un jugador joven domina los links como Woods o Faldo, el mercado reacciona rápidamente, ajustando cuotas y volumen de apuestas.
En resumen
Las leyendas de The Open han moldeado la esencia del torneo: técnica, fortaleza mental y una conexión emocional con el campo. Sus victorias resuenan no solo en la historia del golf, sino también en las dinámicas de las apuestas deportivas, donde su peso histórico y reputación siguen influyendo en cuotas, comportamiento de mercado y volumen apostado.
En definitiva, su legado trasciende generaciones, ligando la grandeza deportiva con el pulso económico y emocional del mundo del golf y del entretenimiento.