Los estadounidenses han empezado muy fuertes en el Ridgewood Country Club. Ataque total en sus hoyos para poner la mayor distancia posible respecto a los principales candidatos a este primer playoff de la FedExCup.
Los primeros en golpear han sido cuatro, sí tenemos cuatro líderes, y los cuatro yankees, a saber, Jamie Lovemark, Kevin Tway, Vaughn Taylor y Sean O’Hair. Ninguno está en las quinielas para el triunfo pero en torneos de este tipo todo puede ocurrir y de momento, lo que tienen que hacer el resto es bajarles de ahí, puesto que se han colocado con cuatro buenas tarjetas de 66 golpes cada uno.
Y si todos ellos están muy juntos, más lo están todos los que vienen por detrás a un único impacto, hasta 13, encabezados por Dustin Johnson, Brooks Koepka y Hideki Matsuyama y con nombres propios como Tommy Fleetwood o Rafa Cabrera Bello. Muy buen hacer del canario a un golpe del liderato, donde esperábamos ver también a Jon Rahm, pero al menos tenemos a Rafa, con una ronda sin errores de cuatro birdies y una demostración de lo que ya anunciábamos: viene a por todas, a convencer al capitán europeo de que debe estar en la Ryder.
Y manos a la obra, fallando solo una calle, con buen ritmo, empezando y terminando con muy buenas sensaciones, serio y confiado en sus opciones. Este es el Rafa ganador, el que puede dar muchas alegrías y más de un quebradero de cabeza a los de arriba.
Sus rivales están todos por detrás salvo Paul Casey, que empata con él, ya que Ian Poulter está con -2 y Russell Knox con +2.
Como decíamos, también están muy fuertes Dustin Johnson y un Brooks Koepka que no quiere salirse de su línea, de su buen momento, ni soltar del cogote a DJ, por lo que pudiera pasar y por si puede pescar algo; sabe que está en su momento y no lo va a desaprovechar.
Más abajo encontramos a Phil Mickelson con -3, Justin Thomas con -2, Jordan Spieth con ronda de 70 y -1, Tiger Woods con 71 y el PAR, mismos golpes que Jason Day y Bubba Watson y con peor comienzo Justin Rose (72) y Jon Rahm (75).
Extraño arranque el suyo, con excesivos errores impropios de su calidad y ranking, que le granjearon tres birdies y hasta siete bogeys. Fallón con el driver, una de sus grandes virtudes, y sin encontrar el camino correcto al hoyo. Le ha faltado pegada, acierto y consistencia, pero no es algo de lo que deba preocuparse en exceso pues seguro volverá por sus fueros. Eso sí, tendrá que rebajar mucho las prestaciones para lograr clasificarse, algo que no será fácil.
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Fotos: PGA Tour
