Este Scottish Open ha empezado como esperábamos, con el típico clima de agua final, algo de niebla a primeras horas, viento y frío. Por todos lados se veían jerseys, sudaderas, gorros, guantes y ropa que hace poco más de una semana teníamos guardada al fondo del armario.
Y es que el frío de esta zona escocesa se ha hecho notar y Lee Westwood se ha aclimatado a la perfección, con 62 golpes en su primera vuelta al campo para gritara los cuatro costados que sí, es un veterano y sí, no tiene el ranking de antaño, pero que ha venido a por todas.
62 golpes para él con dos eagles y cinco birdies en una demostración de galones, de experiencia y de saber pararse bien sobre el campo, haciendo valer también las mejores condiciones vespertinas que las de la mañana, donde todo estuvo mucho más desapacible.
A un golpe suyo y también en la ronda de tarde, Alexander Bjork y el holandés Joost Luiten (-8); a dos Scott Jamieson (-7) y ya más abajo, Ian Poulter (67), Nicolas Colsaerts y Haotong Li (68), Tommy Fleetwood (69), Bernd Wiesberger (70), Thomas Pieters (71)…
Si hablamos de los españoles es para decir que todos tuvieron mala suerte y jugaron por la mañana, lo que se notó en sus vueltas. Por ejemplo, tanto Álvaro Quirós como Jorge Campillo y Adrián Otaegui se fueron al PAR del campo para ser los mejores de los nuestros; Nacho Elvira y Pablo Larrazábal se marcaron 72 golpes, Adri Arnaus 75 y Miguel Ángel Jiménez 78.
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Fotos: European Tour